LLevo desde el 2017 involucrado en la creación de páginas web para clientes.
Y si algo he aprendido, es que los lanzamientos de la web se atascan una barbaridad.
Llega a ser insufrible, en muchos casos, una vez terminado el diseño, tardan mucho en publicarse.
Pero creo que lo que más atasca con diferencia, es el propio cliente, puesto que no se decide cómo poner los textos, los contenidos. ¿Qué pongo en la web? ¿Cómo lo pongo?
Lo que suele pasar (no siempre claro) es que visitan unas cuantas webs parecidas y acaban poniendo algo similar, porque si no, la web no se lanza ni a tiros.
Lo que se supone que tiene que sonar diferente, acaba sonando a refrito del sector.
Un drama.
Pongamos un ejemplo que utilicé recientemente en una web para un entrenador personal (el de la derecha)
GIMNASIO HOME FIT SEGORBE
Juan Andrés: Entrenador Personal
Excelencia y pasión por nuestro trabajo. Somos el apoyo que necesitas para conseguir tus metas.
“No puedes evitar hacerte cada día más viejo, pero está en tu mano parecer y sentirte mucho más joven”
Soy Javier entrenador personal en Clínica FIT SEGORBE y mi trabajo es ayudarte a que la frase que has leído arriba se cumpla.
El objetivo de mis clases es que te sientas cada vez más fuerte, renovado y saludable en tu día a día.
La Primera propuesta está sacada de una web real en internet, pero he cambiado los datos y el nombre por privacidad, y además he puesto el mismo nombre de localidad, para simular que alguien está buscando entrenador personal en Segorbe.
La segunda es una propuesta de un negocio real, que sirve para lo mismo, porque se trata del mismo tipo de negocio.
Ahora te SUGIERO ALGO, OLVÍDATE DEL DISEÑO POR UN MOMENTO…
Y te pregunto…
Si fueras alguien que busca por internet un entrenador personal en «Algeciras» y visitas estas 2 webs. Con este mensaje inicial, lo lees y te vas de la web. ¿De cuál te acordarías pasados 3 días? No digo que te acuerdes palabra por palabra, pero más o menos.
Esta es la idea que busco, cuando trato de redactar propuestas de valor, escribir algo, que suene diferente.
Una propuesta de valor tiene que dejar claro por un lado, qué ofreces, a qué te dedicas, y en qué puedes ayudar y beneficiar a tu potencial cliente.
Pero lo que he aprendido es que si puedes darle una vuelta más y sonar diferente, además de dejar claro todo lo anterior, no solo tendrás una propuesta, tendrás un mensaje de marca.
Ahora me interesa tu propuesta, ¿No sabes como transmitirla?
